Una vida insignificante...

Una vida insignificante.... donde sin dinero no se puede vivir... donde la gente mide a las personas por su imperio.

Yo ni tengo imperio, ni tengo para vivir de sobra, veo que la gente que vive de sobra se queja de que no tiene y simplemente es porque no se saben administrar mientras otros mueren cada día de desanimo, amargura, tristeza... por no darle a sus pequeños las cosas necesarias.... eso sí que es no tener.

El sentir que por mucho esfuerzo que hagas no servirá de nada y estarás día tras día igual.

Es asqueroso ver esos comportamientos cada vez más, cuando no estas con unos mínimos ingresos en tu vida por mucho que quieras, vas a estar mal, solo ves salida cuando encuentras algo de trabajo, pagas facturas, haces compra y puedes dar algún mínimo capricho a tus retoños eso te invade de felicidad y a veces hasta llorar de alegría.

Cuando estas en esas situaciones te cambia hasta el humor, nada más tienes tiempo de pensar y de arreglar el problema de ese momento del día, acabas cansada pues hasta para dormir es difícil dejar de pensar en los problemas cuando son de primera necesidad y al ver que escasea la despensa dejas de comer.

A veces es tan difícil esconder las lágrimas cuando eres madre que se escapan inventas mil tonterías para que esa personita no se preocupe.

Pero esas personitas no notan demasiado, pues intentas que no se enteren de esas cosas, solo notan el  mal humor....porque por mucho que intentemos ocultar nuestros sentimientos al estar conectados con ellos se darán cuenta... No seáis como yo pedid ayuda...

ver como te consumes cada día más y más con lo que eras antes.....

eso es morir en vida.... 

No soy feliz la verdad, he de admitir que me esta siendo muy difícil haber dejado mis sueños pisoteados en un ricón, ser madre sin estabilidad por el maldito dinero, que por más que haces solo acabas peor en tu interior....

La gente da de lado a las madres cuando hacen más que algunas personas....

Yo nunca he dejado un trabajo por ser madre, ni tampoco a la inversa, es cuestión de saber administrarse.

Cuando tenga un trabajo que me deje pagar las facturas gustosamente, hacer una gran compra sin tener que escatimar en nada seré feliz, pues podré pensar en seguir con mis sueños recogerlos de aquel rincón sacudir el polvo a cumulado y empezar con la acción!!